miércoles, 11 de abril de 2018

Subordinadas Adjetivas y La Oreja de Van Gogh

¿Serías capaz de encontrar las subordinadas adjetivas en esta canción de La Oreja de Van Gogh?


 

No olvides señalar el relativo que las introduce y su segunda función sintáctica.

Para que te sea más fácil aquí tienes la letra:

Tengo aquí, bajo el vestido, bien escondiditos tus besos malditos,
mariposas que al alba de regreso a casa se venían conmigo.
Yo tengo aquí, bajo la cama, cada madrugada que la deshicimos.
Tengo tantas cosas y ninguna está en su sitio.

Tengo aquí, dentro de un vaso, la primera ola de aquella mañana;
tengo en uno de mis rizos el ritmo del tango que siempre bailabas.
Yo tengo escrito en un suspiro aquellas palabras que nunca dijimos.
Tengo tantas cosas y ninguna está en su sitio.

Después de ti entendí que el tiempo no hace amigos;
qué corto fue al amor y qué largo el olvido.

Seré tu luz, seré un disfraz, una farola que se encienda al pasar;
cualquier mariposa; la estrella polar que viene sola y que solita se va.
Seré el sabor de un beso en el mar,
un viejo proverbio sobre cómo olvidar.
Seré inmortal porque yo soy tu destino.

Tengo aquí, bajo mi almohada, tu fotografía frente a Santa Clara.
Dice más de mil palabras y yo le contesto que también te amaba.
Yo tengo abierta la ventana porque así se escapa el tiempo sin verte.
Tengo tantas cosas, tengo todas en mi mente.

Después de ti entendí que el tiempo no hace amigos;
qué corto fue el amor y qué largo el olvido.

Seré tu luz, seré un disfraz, una farola que se encienda al pasar;
cualquier mariposa; la estrella polar que viene sola y que solita se va.
Seré el sabor de un beso en el mar,
un viejo proverbio sobre cómo olvidar.
Seré inmortal.

Seré ese lunar que adorne tu piel; una paloma cerca de donde estés;
un golpe de suerte; el café de las tres; alguna mirada que te haga enloquecer;
seré la voz que avise en el tren; un presentimiento de que todo ira bien.
Seré inmortal porque yo soy tu destino.


4 comentarios:

  1. Las oraciones subordinadas que he encontrado pueden ser las siguientes: "mariposas que al alba de regreso a casa se venían conmigo" (línea 2) donde encontramos "que", que tiene la función de pronombre relativo y de sujeto.
    Luego en la línea 6: "el ritmo del tango que siempre bailabas" tenemos el relativo "que" desempeñando la función de complemento directo. Después en la siguiente línea: "aquellas palabras que nunca dijimos" aparece el "que" relativo con la función de complemento directo.
    En la línea 11: "una farola que se encienda al pasar" es introducida por el relativo "que" con la función de sujeto.
    Luego tenemos la oración "la estrella polar que viene sola y que solita se va" donde hay dos relativos, por lo tanto dos oraciones subordinadas unida por un nexo, en este caso la conjunción "y", por lo que formaría a su vez una estructura coordinada constituida así por estas dos subordinadas. En estas oraciones vemos que el relativo "que" funciona como sujeto.
    La siguiente oración subordinada es: "seré ese lunar que adorne tu piel", donde como podemos observar, el pronombre relativo "que" desempeña la función de complemento directo.
    Luego encontramos "alguna mirada al pasar que te haga enloquecer" donde volvemos a toparnos con el relativo, pero desempeñando la función de sujeto.
    Por último lugar, se encuentra la oración "seré la voz que avise el tren", donde "que" es un relativo y tiene la función de complemento directo.

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    1. El anterior comentario ha sido escrito por Ana Sánchez García.

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  2. Gracias, Ana. Tu respuesta es exhaustiva, así que te mereces la enhorabuena. Solo hay dos matices que debo hacer:
    1. "Seré ese lunar que adorne tu piel", el relativo "que" funciona como sujeto de "adorne";
    2. "Seré la voz que avise en el tren", el relativo "que" funciona también como sujeto de "avise".
    Por lo demás, perfecto.

    Sería estupendo que todos los demás que leen la entrada, participasen como lo has hecho tú.

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